Como no podia ser de otra forma, el viaje comenzó con incidentes.
Metí en el gps las coordenadas del hotel donde iba a dejar mi coche durante el viaje, y cuando estamos llegando a Madrid capital nos hace tomar un desvio. Resulta ke nos empezamos a alejar de la capital y nos vemos rodeados de montañas. Seguimos un poco mas y acabamos en un parque natural. Preguntamos y nos dicen ke tenemos como media hora hasta el aeropuerto. Tras varias vueltas un poco graciosas y con el tiempo pegado al culo, conseguimos llegar al hotel. LLegamos a falta de 10 minutos de ke saliera el transporte ke nos llevaba al aeropuerto, asike se puede decir ke lo hemos conseguido por los pelos.
LLegamos al aeropuerto, facturamos y estos 2 kerian desayunar (9 euros por un bocadillo de jamon serrano y una cocacola...).
Llegamos a Amsterdan sin mas complicaciones y nos disponemos a esperar las 4 horas y media ke tenemos hasta la salida del siguiente avion, asike vamos a buscar un sitio para comer.
Salimos del aeropuerto para ver si podemos ir a la capital a comer, pero no nos iba a dar tiempo.
Vamos a un restaurante del aeropuerto en el ke te ponian la comida al peso y por 4 macarrones de mierda, 3 calzzones y 3 cocacolas nos han cobrado 37 euros... ke estafadores de mierda.
Nos merecemos un postre y vamos a una heladeria y leemos "small children icecream 7€". Anda y ke se la ondulen.
Por fin embarcamos en el avion ke nos va a llevar a Tokyo, y nada mas entrar vemos unos asientos enormes, pantallas y vamos a nuestros sitios, vemos como van empeorando hasta llegar a la clase turista. Aun asi, tenemos nuestras pantallas, videojuegos, peliculas, musica...
Para cenar una ensalada de pepino (ke cruz con el puto pepino), unos fideos grises ke estaban malisimos y arroz con pollo al curri (esto bastante decente), despues un cafecito y a dormir mientras veo Terminator.
Un par de partidas a los juegos y a escribir esto mientras escucho la mejor musica del mundo de grupos poperos japoneses ke solo escuchan en sus barrios.
Llegamos al aeropuerto de Narita y tras el control de inmigracion de rigor (acojonante lo de la foto y el control de huellas), recogemos la maleta (no sin ke antes nos digan "llevais drogas o armas?" - "no" - "joe ke aburridos", muy simpatica la del control) y nos vamos a activar el Japan Rail Pass. Al activarlos nos entregan ya los primeros billetes para ir a Tokyo y de ahi a Kyoto.
Cogemos el primer shinkansen del viaje. Tren comodo, limpio y rapido.
Llegamos a Kyoto y nos vamos en direccion contraria al hotel, asike tras un rato, a desandar lo andado y coger el buen camino (todo esto cargados con las mochilas claro).
Ya nos damos cuenta de la gran diferencia ke hay entre ellos y nosotros. La educacion llevada al maximo exponente, disposicion de ayudar y amabilidad impensable en nuestra sociedad.
Por la calle vemos decenas de makinas de vending, el 90% de bebidas, y el resto de tabaco. Tambien hay muchos seven elevens, family markets y lawson, donde aprovisionarse de las extrañas y exoticas comidas de las ke se nutren los japoneses.
Cuando llegamos al hotel, nos cambiamos de ropa y nos vamos a buscar un sitio para tomar algo o cenar, y al final optamos por la segunda opcion. Fuimos a un sitio especializado en ramen, y joder ke si lo estaba... Ke rico estaba por dios.
Tras la cena, tocaba ir a tomar algo y nos metimos en un bar de combinados ke no sabian ni ke inventar ya, asike pedimos 3 bebidas sin saber exactamente ke pediamos.
Nos tomamos los cacharros junto con la tapa de pescado ke nos sacaron (si, me comi la tapa de pescado), y un paseo antes de ir al hotel a dormir.
La tapa fue una estafa, ya ke nos cobraron mil yenes por ellas, y no las habiamos pedido.